España - Voz Libre

Prejuicios literarios

Fernando J. Lopez, Culturamas - 12 de enero de 2013
¿Qué es lo literario? Llevo años trabajando en esto y claro que he llegado a algunas respuestas -y hasta a ciertas argumentaciones más o menos válidas-, pero en todas hay un halo de subjetividad que me impide pronunciar una sola sentencia dogmática al respecto.
¿Qué es lo literario? Llevo años trabajando en esto -como editor, como profesor, como investigador y como escritor- y, honestamente, cuanto más profundizo en ello, menos claro lo tengo. Claro que he llegado a algunas respuestas -y hasta a ciertas argumentaciones más o menos válidas-, pero en todas hay un halo de subjetividad que me impide pronunciar una sola sentencia dogmática al respecto.

Sin embargo, echo en falta ese mismo relativismo cuando escucho cómo se etiqueta tal o cual novela en determinados medios académicos y críticos. Etiquetas que van desde el no siempre acertado reduccionismo del género literario -novela negra, novela rosa, novela histórica, novela gráfica…- hasta el manido y nada literario género sexual -novela femenina, novela masculina, novela gay…- o, cómo no, a su pretendida o inexistente calidad artística -literatura vs. subliteratura., novela de autor vs. best-seller. Resulta cómodo encasillar un lanzamiento editorial y, sobre todo, nos da una cierta sensación de seguridad poder afirmar -cómo nos gusta ser jueces- qué es bueno y qué no lo es.

Desde esta estrecha perspectiva, no suele ser literario nada que aborde con naturalidad la época presente. Frente a otras literaturas, la novela española parece mirar con recelo el tiempo actual, como si el contagio del mundo que nos rodea pudiera llevarse consigo la posible calidad de una narración. Frente a esta tentación de retratar el hoy -algo que echo en falta en casi todas las novedades de ciertas editoriales-, se premia con gusto el canto al pasado y la aparición de una enésima revisión sobre la guerra civil, la posguerra o, en un alarde de modernidad, hasta la transición. En el próximo siglo lo tendrán muy difícil si pretenden entender nuestro tiempo actual gracias a nuestra literatura, pues poco verán en ella de lo que somos . Y de lo que vivimos.

Por supuesto, tampoco es literario aquello que opta por una prosa más descarnada, o que apuesta por retratar la lengua espontánea y viva de la calle. Lo literario ha de tender a lo engolado -que no a lo poético: esto último tampoco está nada in- y, más aún, a lo críptico. Se puede, eso sí, escoger entre una sintaxis desmadrada en lo extenso y lo subordinado o, si se pretende ser rupturista, optar por una poética más próxima al hipertexto y la segmentación pop, tan efectista como efímera. El ideal de naturalidad cervantino o galdosiano está poco menos que condenado por anacrónico y, sobre todo, por facilón, pues de todos es sabido que contar una historia sin afectación y logrando captar la esencia de hechos y personajes es tarea harto sencilla.

Y, por último, hay dos criterios que jamás fallan: nunca es literario un título que figure en una lista de best-sellers ni aquel que no sea ovacionado en uno de esos suplementos culturales  donde se comenta exclusivamente lo que producen los amigos, para dejar claro que la cultura es un círculo perfectamente cerrado donde solo tiene cabida un grupo de elegidos.

Ante tanto prejuicio, cabe la opción de bajar la cabeza y aceptar este credo que encumbra a quien le place o adoptar la postura contraria y decir que es literatura aquello que consiga emocionarnos, provocarnos, alterarnos, atraparnos. Podemos elegir el canon y hasta la religión del gafapastismo o decantarnos por la mezcla y el eclecticismo, disfrutando sin complejos de aquellos títulos -novedades o clásicos, minoritarios o best-sellers- que nos hagan revivir, palabra tras palabra, el mundo que se encierra dentro de ellos.

En mi caso, que llevo tiempo rebatiendo términos con el de “novela gay” -las novelas no se acuestan con nadie, aunque nos presenten a gente que sí lo hace-, cada vez tengo más claro que el hecho literario es estudiable, sí. Y discutible, por supuesto. Y filológicamente analizable, claro. Pero también es un hecho privado, subjetivo y, sobre todo, esencialmente íntimo, así que cada vez tengo menos prejuicios y, a cambio, más voracidad lectora. Quizá porque, en lo que a mis novelas respecta, no sé bajo qué etiqueta ni en qué casilla colocarlas. Y, si les soy sincero, tampoco quiero hacerlo.


  • Facebook
  • Google Bookmarks
  • linkedin
  • Mixx
  • MySpace
  • netvibes
  • Twitter
 

Eventos

La morte amoureuse de Théophile Gautier

La morte amoureuse de Théophile Gautier au Théâtre Darius Milhaud

« Memories »

« Memories » de Philippe Lebraud et Pierre Glénat

Paul Klee, Peindre la musique

L’exposition numérique rend hommage aux deux passions de Klee, la musique et la peinture, et révèle les gammes pictural...

Alô !!! Tudo bem??? Brésil-La culture en déliquescence ! Un film de 1h08 mn

Photo extraite du film de Mario Grave - S'abonner sur notre canal Youtube  pour avoir accès à nos films :

Mundo vintage (clicar no título)

Jean Segura, collectionneur d'affiches de cinéma : « J'en possède entre 10 000 et 12 000 »

Journaliste scientifique, auteur de plusieurs ouvrages, concepteur du site ruedescollectionneurs, Jean Segura est aussi un passionné et un spécialiste de l'affiche de cinéma ancienne. Rencontre, ici.


Destaques de París

« Loading, l'art urbain à l'ère numérique »

jusqu'au 21 juillet 2024 au Grand Palais Immersif


            


Notícias

Madrid, 11 mars 2004

L'Espagne, mais aussi l'Union européenne, rendent un hommage solennel lundi aux 192 victimes de 17 nationalités assassinées il y a 20 ans à Madrid dans des attentats à la bombe qui marquèrent le début des attaques islamistes de masse en Europe.

 
Pablo Neruda a-t-il été empoisonné ?
Cinquante après, le Chili relance l'enquête sur la mort du poète et Prix Nobel de littérature survenue sous la dictature du général Pinochet. Cancer de la prostate ou empoisonnement ?
 
Paris 2024 : les bouquinistes ne seront pas déplacés
Paris 2024 : les bouquinistes des quais de Seine ne seront finalement pas déplacés pour la cérémonie d’ouverture des JO « Déplacer ces boîtes, c’était toucher à une mémoire vivante de Paris » a déclaré à l'AFP Albert Abid, bouquiniste depuis dix ans au quai de la Tournelle.
 
Sophie Calle et la mort !
Sophie Calle, artiste de renom, achète des concessions funéraires au USA en France et ailleurs. "J'achète des trous" dit -elle à propos de sa mort.
 
53 journalistes et proches de médias tués dans la guerre Israel- Hamas
Cinquante-trois journalistes et employés de médias ont été tués depuis le début de la guerre entre Israël et le Hamas, selon le dernier décompte du Comité pour la protection des journalistes (CPJ)